Esta es una ampliación de la entrevista realizada a Martha Peterson en el número 124 de nuestra revista, que ya puedes encontrar en todos los quioscos de España y en su versión digital en Magzter y Kioskoymas.com. Seguimos conversando con la creadora de Essential Somatics®, sobre su fascinante enfoque y algunos de sus principales conceptos de la somática y el dolor.
Por Elena Sepúlveda
Martha Peterson es una prestigiosa profesora de Yoga con más de tres décadas de experiencia con profesionales de la danza, el trabajo corporal y las disciplinas somáticas, ha creado este programa orientado a profesionales del movimiento, personas con dolor crónico o movilidad limitada. Ofrece además formaciones y talleres en línea y nos explica en qué consiste su método. Si te han gustado la entrevista de Elena Sepúlveda y este contenido complementario que te ofrecemos a continuación aquí, no te pierdas el Retiro Essential Somatics® que ofrece Martha en el Centro Santillán de Málaga del 22 al 28 de mayo de 2022.
YOGA JOURNAL: ¿Cuál es la principal diferencia entre la educación somática clínica y otros tipos de terapias de alivio del dolor?
MARTHA PETERSON: La educación somática clínica es activa, a diferencia de muchas terapias de alivio del dolor como el masaje, los puntos gatillo u otros métodos. La mayoría de estos enfoques son pasivos. Solo proporcionan un alivio temporal del dolor, trabajando sobre la persona en lugar de animarla a participar activamente en la liberación de su tensión muscular. Dado que únicamente se puede acceder a los músculos que están tensos a nivel cerebral, solo la participación activa puede crear el cambio necesario.
¿Cómo es una clase de somática clínica?
Dado que la somática clínica es educación, se espera que los participantes se impliquen activamente en su propia educación y proceso. En clase se les aconseja que escuchen sus cuerpos y que involucren activamente sus cerebros para tomar conciencia de la calidad de su movimiento y de lo que están sintiendo. Se les invita a que tomen conciencia de sus hábitos de movimiento, de las emociones que puedan aflorar o de cualquier nueva sensación que permita un movimiento más libre. Al salir de clase, se les anima a que practiquen a diario, a que escuchen atentamente a su cuerpo y a que reevalúen sus hábitos de movimiento cotidianos. Si se limitan a realizar los movimientos en clase sin aplicar lo aprendido a su vida cotidiana, no experimentarán beneficios a largo plazo.
JY: ¿Cuál es el papel del sistema nervioso en este método?
M.P.: Cuando trabajamos con el sistema nervioso, no hay diferencia entre el cuerpo mental/emocional y el movimiento. El cerebro responde a todo el feedback del mundo exterior (así como de nuestro interior). Esto puede cambiar la forma en que el cerebro organiza el cuerpo. Se pueden formar hábitos disfuncionales y poco útiles que crean fuertes conexiones neuronales en el cerebro. La somática clínica y la pandiculación pueden ayudar a recablear el cerebro y el sistema nervioso sensoriomotor para que funcionen de forma más eficiente, eficaz y precisa.
Y.J.: ¿Qué significa pandiculación?
M.P.: Es lo que hacen los animales cuando se levantan del descanso (o antes de acostarse para descansar). Muchos lo describen como un «estiramiento similar al bostezo». Es un patrón de acción reflexivo que moviliza los músculos para la acción y también restablece el nivel de tensión en ellos.
La pandiculación consta de tres pasos: una contracción de los músculos y sus sinergias, ligeramente más fuerte que la anterior, seguida de una liberación lenta, controlada y consciente, y finalmente una relajación completa. Estos tres pasos envían una retroalimentación al sistema sensoriomotor y restablecen tanto la longitud como la función del músculo de forma segura.
Cuando pandiculamos estamos restableciendo la conexión entre cerebro y músculo, para que el primero pueda percibir mejor y nos podamos mover mejor. Nos lleva al momento presente en el cuerpo.
Y.J.: Los tres patrones de reflejo de estrés son muy interesantes para entender cómo los músculos reaccionan a los acontecimientos de la vida y crean patrones. Uno de ellos es el reflejo de luz verde, ¿nos puedes hablar más de él?
M.P.: El reflejo de luz verde (también conocido como respuesta de Landau) es el reflejo implicado en el movimiento hacia delante. Los grandes músculos de la espalda se contraen para moverte hacia delante al caminar, correr, estar de pie y responder a la necesidad de «avanzar». Pueden aprender a permanecer excesivamente contraídos, tirando de la espalda en un arco exagerado (lordosis). Cuando se vuelve habitual, este reflejo puede contribuir a la aparición de hernias discales, dolor de cuello y de hombros, ciática y tensión en los isquiotibiales.
Y.J.: En somática, también describes el reflejo de luz roja. ¿Cómo nos afecta?
El reflejo de luz roja (también conocido como respuesta de sobresalto) es el más primario del tronco cerebral de los animales vertebrados. Es el reflejo de protección y retracción en respuesta a la preocupación, el miedo, la ansiedad, la angustia prolongada y la negatividad. Implica a los músculos de la parte delantera del cuerpo, que se tensan para tirar de él hacia delante. Un ruido fuerte, un sonido inesperado o un trauma emocional (o largas horas encorvado frente al ordenador) pueden hacer que los músculos de la parte delantera del cuerpo se contraigan repentinamente y el cuerpo se retraiga hacia dentro en una postura de desplome, que se presenta con los hombros redondeados, el pecho deprimido y la cabeza inclinada hacia delante.
Habituarse al reflejo de luz roja puede provocar dolor de cuello crónico, dolor de mandíbula (como en el caso de la articulación temporomandibular), cifosis postural, dolor de cadera, dolor de espalda media y respiración superficial. La incapacidad de respirar profundamente priva al cerebro, la sangre y los músculos del oxígeno que necesitan. Esto, a su vez, puede causar fatiga, depresión, ansiedad, problemas de sueño y exacerbar las alergias.
Y.J.: Por último, ¿cómo se produce el reflejo traumático?
El reflejo traumático se genera en respuesta a accidentes y lesiones y a la necesidad de evitar más dolor al compensar una lesión. También puede ocurrir debido a un deporte o actividad repetitiva de un solo lado. En este reflejo intervienen los músculos rotadores del tronco que, al contraerse, levantan la cadera hacia un lado y tuercen ligeramente la columna vertebral. Ejemplos serían la tarea repetitiva de sostener a un niño pequeño sobre la cadera, una caída repentina de cualquier tipo, la cojera de un lado en respuesta a, por ejemplo, una torcedura de tobillo en el otro lado, aterrizar sobre el coxis en una caída o tener apendicitis.
Este reflejo se presenta con flexiones y rotaciones laterales en la pelvis, el tronco, el hombro y la cabeza. Esta compensación postural puede ser leve, o muy notoria, pero sus efectos pueden ser devastadores. En muchos casos, la escoliosis es un ejemplo de Reflejo Traumático habituado que crea una curva y una inclinación en la columna vertebral y el tronco.Para saber más sobre este método visita: essentialsomatics.com
Si quieres leer la entrevista completa, puedes encontrarla en el número 124 de la revista Yoga Journal España. Para conseguirlo, llámanos al 916326251 o escríbenos a suscripciones@revistayogaspirit.es