Dentro de las terapias ayurvédicas existe la terapia de puntos marma, también llamada Marmani Chikitsa, la cual implica la estimulación de puntos sensibles para promover la sanación en los planos físico, mental y emocional afectando el flujo de prana. Es una terapia basada en la digitopresión de 108 puntos.
Por Pia Moure // Fotos de Laura Colomé
El Ayurveda nos enseña que, para mantenernos sanos en esta vida, debemos permitir que la energía vital fluya sin traba alguna. Si nuestra condición no es la adecuada, o si nos dejamos llevar por pensamientos o actitudes nocivas para nuestro estilo de vida, con las que nos llenamos de resentimiento y rabia, esa energía se bloquea. El cuerpo y la mente dejarán entonces de funcionar armónicamente, y ello nos impedirá vivir nuestra vida de un modo pleno.
Puesto que todo fue creado desde Purusha y Prakriti, toda la materia es fundamentalmente la misma. Si bien puede ser difícil percibir esta unicidad del todo, los puntos marma proveen un punto de entrada muy sensible hacia estos reinos más sutiles de la conexión físico-energética que reside en todos nosotros.
En palabras del Dr. Vasant Lad: «como la mecánica cuántica, el Ayurveda sostiene que el ser humano no es una estructura material solida y estable, sino una colección de energía e inteligencia dinámica y cambiante dentro del campo más grande de energía e inteligencia que es el universo».
¿Qué son los puntos marma?
Los puntos marma son vórtices de prana, la fuerza de vida que se puede usar como entrada hacia este campo dinámico. El cuerpo cuenta con numerosos puntos de energía (108 en total) que estimulan algunas de sus funciones y mantienen su salud. Aunque estos puntos (conocidos como marma) no pueden localizarse mediante instrumentos científicos, se considera que hay pruebas suficientes que permiten afirmar que si uno u otro punto no funciona o se encuentra bloqueado, surgirá la enfermedad. La mayor parte de esos puntos se encuentran en zonas vitales como los tendones, las arterias y venas principales, así como las articulaciones mayores.
Los textos ayurvédicos sugieren que los puntos marma son partes del cuerpo donde dos o más sistemas importantes se entrelazan, como: los nervios y los vasos sanguíneos; o los huesos y los nervios; o los músculos, los ligamentos y las articulaciones.
En un punto marma se concentra la energía y, por tanto, el daño a cualquiera de estos puntos puede acarrear gravesenfermedades. Los puntos marma se pueden encontrar en todo el cuerpo, desde las manos y los pies hasta el tronco y la cabeza. Cuando se manipulan por medio de masajes, aplicación de aceites y hierbas, calor o presión, según el Dr Muley, se puede «alterar las funciones orgánicas y las condiciones estructurales del cuerpo».
Existen tres centros marma principales: la cabeza, el corazón y la vejiga. Una lesión grave en cualquiera de estos centros puede causar la muerte.
Karma y reencarnación
La reencarnación y la ley del karma son pilares básicos en Ayurveda. Entendiendo esto, nos abrimos a explorar otras posibilidades frente a enfermedades que surgen sin razón aparente (como por ejemplo, en niños). En estos casos, el Ayurveda considera que arrastramos una predisposición hacia ese trastorno desde una vida precedente. Siendo los puntos marma unos mecanismos autorreguladores, en el momento del nacimiento aún están bloqueados.
En algunas personas, el flujo de prana a través de estos puntos puede quedar bloqueado por los recuerdos procedentes de vidas anteriores. Aunque los recuerdos puedan existir en un nivel inconsciente, estos y cualquier trauma asociado a ellos, pueden tener un profundo efecto sobre la persona.
Será, pues, tarea del médico ayurvédico tratar ciertos puntos marma para desbloquear la energía y permitir que el prana fluya libremente, eliminando así la enfermedad.
Historia y evolución
El propósito de la terapia de puntos marma hoy en día es promover la sanación. Sin embargo, como se trata de puntos vitales, también ha sido utilizada para hacer daño. Según el Dr. Marc Halpern, «Cualquier área del cuerpo vulnerable de lastimarse con un golpe contundente, se puede sanar con un toque terapéutico».
Siendo una parte importante del Ayurveda, el Yoga y las artes marciales del sur de India, marma se originó en la civilización de la India más antigua, conocida como la cultura Indus-Sarasvati (3500 – 1700 a.C.), la cual se encontraba en el norte de la India y se desarrolló junto con otras disciplinas védicas de ese tiempo.
Como un medio para causar daño a un oponente, como guía para sanar las heridas y como un mapa para el uso de armaduras en combate, los puntos marma fueron una parte integral de las artes marciales del sur de la India y, según el Dr. David Frawley – uno de los mayores expertos en Ayurveda de Occidente–, «el camino del guerrero que aprendió a dominar su prana para fines ofensivos y defensivos».
Los cirujanos del tiempo de guerra en la época clásica eran versados en la energética de los puntos marma con el fin de proporcionar la mejor atención posible en el campo de batalla. Se pueden encontrar referencias a estos puntos en una amplia variedad de textos antiguos, incluidos el Rig Veda, Mahabharata, Charaka Samhita, Sushruta Samhita y textos clásicos del Yoga donde el marma se incorpora con asanas, pranayama y nadis.
El cirujano ayurvédico Sushruta, debe su reconocimiento por ser el principal contribuyente al estudio clásico de marma. Su texto, el Sushruta Samhita, define los marma como puntos fatales y contiene detalles para la manipulación mediante técnicas quirúrgicas y en el tratamiento de condiciones graves. En la sección de anatomía de dicho texto, existe documentación sobre la ubicación y los efectos de cada punto, y este conocimiento ha evolucionado con cada generación de practicantes.
K.R. Krikantha Murthy habla de la existencia de «una reciente tendencia entre algunos conocedores de Ayurveda por equiparar y correlacionar el conocimiento de marma con el antiguo método chino de tratamiento conocido como acupuntura. Aunque el
reconocimiento de puntos específicos en el cuerpo era común a ambos, el objetivo de cada enfoque era bien diferente. Mientras el Ayurveda describía el marma como asientos de prana, las descripciones estaban destinadas principalmente a prevenir al cirujano de no causar daño. En la acupuntura, los puntos se consideran centros de energía vital que, al estimularse con agujas puntiagudas, traería consigo la cura de muchas enfermedades. En ninguna parte en los textos ayurvédicos había alguna sugerencia de interferir con el marma, ya fuera para aliviar el dolor o para la cura de enfermedades».
No obstante, el Dr. Frank Ros afirma que se cometieron errores en traducciones anteriores del Sushruta Samhita. Tras una nueva revisión, «se encontró evidencia que demostraba que los marmas SÍ corresponden, precisamente, con los puntos tradicionales de acupuntura utilizados para tratar órganos vitales y el flujo de Qi».
Los términos dhamanis y siras se intreptaron previamente de manera incorrecta como arterias y venas. En realidad, corresponden a los canales que controlan el flujo de prana (o Qi). Muchos eruditos importantes de Ayurveda están de acuerdo con la afirmación del Dr. Ros. También el Dr. Vasant Lad que, a lo largo de todo su libro Marma Points of Ayurveda, hace una comparación entre marma y acupuntura china.
Tanto si se han utilizado los marma como forma de curación o no, es ahora común que se usen con este fin en las clínicas y escuelas ayurvédicas alrededor del mundo.
¿Qué beneficios aporta?
La cura aplicada a los puntos marma puede influir en las funciones corporales de manera muy similar a como lo hace la acupuntura. De hecho, se cree que antiguamente algún fragmento de los textos ayurvédicos (donde se describe marma) viajó hasta China, donde evolucionó hacia la acupuntura.
El Ayurveda enseña, además, que los puntos marma pueden manipular las energías vata, pitta y kapha, ayudando a reequilibrar la constitución de cada individuo. Esta terapia ayuda a liberar bloqueos energéticos en el cuerpo físico, mental y emocional. Además, activa el funcionamiento correcto de todos los órganos internos; mejora el funcionamiento del sistema inmunitario; libera toxinas y restablece la fluidez de la energía vital y sutil.
Algunos trastornos que pueden tratarse exitosamente con esta terapia son:
- ansiedad
- artritis
- fatiga crónica
- síndrome de colon irritable
- falta de vitalidad
- migrañas
- lesiones neuromusculares
- afecciones cutáneas, entre otras.
Resuelve tus dudas
¿Es una terapia agradable de recibir? La verdad es que no es agradable. Los puntos suelen doler bastante, pues la digitopresión, para que haga un efecto beneficioso, debe ser profunda, y eso trae consigo una sensación de dolor.
La terapia marma ¿es de larga o corta duración? Una sesión completa (con presión de los 108 puntos) suele durar alrededor de dos horas y media. Sin embargo, puedes encontrar terapeutas que trabajan dolencias u órganos específicos, presionando solo algunos puntos, lo cual haría que la sesión fuese bastante más breve.
BIO
Pia Moure se certificó en Terapias Ayurvédicas y Panchakarma Tradicional en Himachal Pradesh y Kerala. Además de terapia de puntos marma, actualmente ofrece otros muchos tratamientos ayurvédicos. Creadora también de Yoga Cards, una baraja de tarjetas que ayuda a preparar secuencias curativas a través de la práctica de asanas. Más información: www.ayurmaa.cat
IG: @ayur_maa / www.yogacards.org
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