Las infusiones son para todo el año. En este tiempo, habrá veces que queramos entrar en calor por las tardes o refrescarnos e hidratarnos con una infusión bien fría. Para cualquiera de las dos opciones, la preparación es simple: viertes unos 100-150 ml de agua hirviendo en una taza y dejas que absorba la parte soluble de la bolsa durante unos pocos minutos (si se trata de una elección para los más pequeños de la casa, es mejor doblar la cantidad de agua para minimizar su concentración). Si la quieres fría, tras infusionar, añade tres hielos o mete en una jarra o botella a la nevera. También puedes hacer hielos aromatizados con tu infusión favorita: simplemente tienes que verter en la hielera la infusión ya fría.
Las infusiones de Biocop, con ingredientes 100% naturales de cultivo ecológico, mantienen al máximo las propiedades de las plantas medicinales para absorber lo mejor que pueden ofrecernos. Té ceylán, rooibos, té verde o cualquiera de nuestras tradicionales infusiones, ¿qué variedad eliges? ¡Te contamos qué te aportará tu elección!
Té ceylan: para mentes despiertas
También conocido como té negro, esta infusión proviene de las hojas de la planta Camellia Sinensis, que en el caso del té ceylan de Biocop, garantiza su procedencia de cultivo biológico. Es una bebida con propiedades antioxidantes. Puede ayudar a controlar los niveles de colesterol y a una mejor salud bucal, gracias a su alto contenido de flúor. Rico en minerales como zinc, calcio, magnesio, potasio o hierro, el té ceylan es una bebida se sabor suave muy beneficiosa para nuestra salud. Es muy digestiva y contribuye a restablecer la flora intestinal. Además, su contenido de cafeína lo convierte en un buen estimulante para personas que necesiten mantenerse activas.
Té rooibos: sabor suave y poder antioxidante
¿Sabías que rooibos significa arbusto rojo en afrikaans? El nombre tiene relación con el color del que se tiñen sus hojas una vez se han secado. De hecho, según se recolectan sus hojas antes o después de oxidarse, cambiará bastante de tono y sabor: el rooibos verde tiene un aroma más vegetal, mientras que el rojo, el más común, es más suave. De la variedad del Asphalatus linearis, el té rooibos no contiene teína y, por lo tanto, se convierte en la mejor elección para las personas a las que les cuesta conciliar el sueño o no asimilan bien los estimulantes.
Sin azúcares añadidos, el sabor dulce del té rooibos de Biocop lo convierte en una opción saludable para saciar a los más golosos. Además, contiene minerales como magnesio, zinc, hierro o calcio, es rico vitamina C, un potente antioxidante, lo que indica que nos ayuda a prevenir el envejecimiento.
Té verde: fresco y lleno de energía
Más delicado que el té negro, el té verde es un clásico entre los tés. Rico el polifenoles, se trata de una bebida con una extraordinaria capacidad antioxidante y con un claro efecto antiinflamatorio para nuestro cuerpo. Se trata de una opción muy recomendable para mantener una dieta equilibrada y de pérdida de grasa, ya que es una bebida sin azúcar y sin apenas calorías, y entre sus propiedades destaca la capacidad de aceleración del metabolismo. Además, cabe tener en cuenta que el té verde contiene también contiene cafeína, aunque en menor proporción que el café. Un tip para conseguir el té verde perfecto es no verter el agua hirviendo, sino justo antes de que arranque o habiéndola dejado reposar unos minutos: así evitarás que su gusto se vuelva amargo. ¡Entre 2 y 3 minutos serán suficientes para saborearlo!
¿Y si hablamos de infusiones?
El té es una infusión más de un gran abanico de posibilidades. Antioxidantes, diuréticas, expectorantes o digestivas, repasamos las propiedades beneficiosas de nuestras infusiones:
- Tomillo. Se trata de una hierba aromática y medicinal que te va ayudar mucho este invierno por su capacidad de aliviar los resfriados: esta infusión es un buen expectorante natural que te ayudará a eliminar la mucosidad y a aliviar la tan molesta tos.
- Manzanilla. Se trata de una de las infusiones más antiguas que existe y no es para menos. La capacidad relajante de la manzanilla favorece una buena digestión, reduce la sensación de estrés y es un excelente antiinflamatorio. Además, su uso externo también ayuda a regenerar la piel, protegiéndola de daños externos.
- Melisa. Si buscas una infusión relajante, está claro, la melisa es tu mejor elección. También conocida como toronjil, tiene un intenso aroma a limón y favorece positivamente a nuestro sistema nervioso, contribuyendo a recuperar la calma. Además, tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que se suele recomendar también en caso de dolores de cabeza.
- Hierba luisa. También conocida como cedrón, la hierba luisa es una planta muy valorada por sus múltiples propiedades medicinales, entre los que destaca su poder antioxidante y digestivo. También ayuda a combatir el insomnio, gracias a su alto contenido en melatonina.
- Menta poleo. Es un digestivo muy popular, por eso se convierte en el postre predilecto para muchas personas. Además, ayuda a relajarse y facilita el descanso y el sueño, así que es una excelente infusión para acabar el día.
- Tila. Ésta sí es la infusión que calma los nervios por excelencia, pero hay mucho más que nos puede aportar, además de su poder sedante. Por ejemplo, posee una actividad antiespasmódica, por ello es recomendable en casos de cólicos, dolores menstruales o contracturas.
- Hinojo. Se trata de una planta silvestre conocida y apreciada en el mundo culinario. La infusión de hinojo contribuye a mejorar digestiones pesadas o empachos, por eso es una excelente elección tras una buena comilona. Al ser una planta rica en potasio, que reduce los efectos del sodio, también se recomienda su consumo a personas con hipertensión.
- Boldo. ¿Sabías que el boldo es una de las plantas medicinales más recomendadas para tratar el hígado y la vesícula biliar?Contiene boldina, un alcaloide que estimula el buen funcionamiento de la vesícula biliar y ofrece beneficios para el hígado. Precisamente su efecto depurativo también la convierten en una opción adecuada para aquellas personas que necesiten reducir sus niveles de colesterol.
- Diente de león. Su nombre se debe a la forma de sus hojas y es un remedio natural que también sirve para mejorar el funcionamiento hepático o como diurético. Pero el diente de león tiene otras propiedades interesantes, como su poder antioxidante y depurativo, que entre otros, previene problemas de la piel como el acné o el eccema.
- Cola de caballo. La cola de caballo es muy conocida como potente diurético natural, esta planta medicinal es idónea para combatir la retención de líquidos. Además, es depurativa, por lo que ayuda a eliminar toxinas de nuestro cuerpo. ¡La opción ideal para los que también quieren cuidarse por dentro!
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