En la edición 128 de nuestra revista, te proponemos una práctica de Yin Yoga que invita a utilizar la inteligencia natural del cuerpo para mejorar la respiración y revitalizar la totalidad del ser. Aunque el yoga pueda ayudarnos a respirar mejor, son muchos los factores que influyen en la calidad de nuestra respiración. Parte de asumir la responsabilidad por la propia salud incluye explorar y decantarse por un estilo de vida que apoye el bienestar.
Por Elena Sepúlveda
Aquí te traemos algunos sencillos consejos de estilo de vida para respirar mejor y revitalizarte energéticamente.
Evita los irritantes pulmonares
No fumes, ni directa, ni involuntaria o pasivamente. Y evita también los irritantes medioambientales, como los productos de limpieza tóxicos o los aparatos de calefacción que generen contaminantes internos en habitaciones con poca ventilación. Recuerda ventilar bien las estancias a diario.
Respira conscientemente
Tu práctica de yoga es un buen lugar para empezar. Los pranayamas y las secuencias que enfatizan la expansión de la cavidad torácica te ayudarán a crear consciencia de tu respiración. Pero más allá y a lo largo del día, quizá quieras establecer una alarma en tu reloj para encontrar al menos 3 momentos en los que pausar, prestar atención a tu respiración y asegurarte de que es profunda, natural y consciente.
Utiliza la Neti Lota
Este método de irrigación nasal de los antiguos yoguis limpia los senos nasales. Su uso regular puede ayudar a aliviar o prevenir resfriados, alergias, congestiones y otros, además de despejar la mente y desbloquear la energía vital. Si vas a utilizar agua del grifo para preparar una solución salina, recuerda filtrarla antes.
Mantén una hidratación óptima
Bebe entre 1,5 y 2 litros de agua al día para proteger los tejidos pulmonares. Las vías respiratorias son cruciales en la defensa de los patógenos externos, algo que hacen generando mucosidad. Para ello, el organismo necesita estar hidratado. Recuerda que la deshidratación es un factor de riesgo frente a enfermedades respiratorias. El nivel de humedad de las estancias también es importante: si sientes los ojos o la piel seca con frecuencia, quizá necesites humidificadores.
Come alimentos picantes
La capsaicina de los alimentos picantes tiene un efecto expectorante y propiedades antiinflamatorias y vasodilatadoras. El sabor picante ayuda a despejar los senos paranasales y a estimular la actividad de los pulmones, algo que podemos comprobar cuando comemos un poco de wasabi verde o un pimiento chile. El consumo (¡moderado!) de los siguientes alimentos podría ayudarte a respirar mejor: cebolla, jengibre, rábano, rúcula, mostaza o pimienta cayena.
Camina en la naturaleza
Sobre todo, a buen ritmo, a primera hora del día y exponiéndote a los rayos suaves del sol. Se cree que la falta de vitamina D (la “vitamina del sol”) está presente en las crisis asmáticas. Por otro lado, respirar aire limpio tiene innumerables ventajas, como son ayudar a eliminar toxinas, estimular el sistema inmunológico y revitalizarse al reducir los niveles de CO2 en sangre, además de rebajar el estrés y la tensión propiciando una respiración más profunda y tranquila.
Autoindagación
En Medicina China, los problemas respiratorios están asociados con la tristeza y los pulmones con la capacidad de recibir y dejar ir (a través del elemento Metal, que es un gran conductor). Para explorar esta dimensión, quizá quieras responder a estas preguntas mediante journaling:
- ¿Qué me resulta difícil o incluso imposible aceptar/recibir?
- ¿Qué me resulta difícil o incluso imposible soltar/dejar ir?
Fortalece el diafragma
Según los expertos, los bebés respiran diafragmáticamente llevando el aire hacia el abdomen, mientras que los adultos vamos empeorando nuestra forma de respirar con el tiempo, reduciéndola al pecho y haciéndola cada vez más corta y superficial. El diafragma es ese curioso músculo con forma de cúpula que separa la cavidad torácica y la cavidad abdominal. Cuando inhalamos, se contrae y baja presionando los órganos internos para permitir que los pulmones se ensanchen y tomen aire.
En este vídeo encontrarás ejercicios para crear conciencia de la respiración diafragmática y fortalecer el músculo respiratorio.
APRENDE MÁS
Estos consejos de estilo de vida y para respirar mejor son parte del programa de acompañamiento MEJOR CON YOGA: RESPIRACIÓN en el que nuestra colaboradora Elena Sepúlveda combina Yin y Yang Yoga con otros recursos para lograr una mejor respiración.
Si quieres saber más acerca de revitalizar tu mente y cuerpo a través de la respiración, no te pierdas el artículo completo de Elena Sepúlveda, en el número 128 de tu revista Yoga Journal España. Para conseguirlo, llámanos al 916326251 o escríbenos a suscripciones@revistayogaspirit.es