Y, de repente, ¡se ha acabado el verano! Las vacaciones disfrutadas ya parecen pasado y el otoño ya está aquí. Junto a él, esa cuesta empinada para la que nos faltan las fuerzas. Ya nos hemos puesto en marcha para retomar rutinas y horarios, y la luz del día se va acortando. Todo ello también nos influye en cómo nos sentimos.
Por Cristina Jardón Serrano, pedagoga.
Sin embargo, la temida vuelta al cole no es sino un cambio de etapa que, si hemos tenido un verdadero descanso mental durante las vacaciones, puede ser de lo más efectiva y productiva para poner en marcha nuevos objetivos
o nuevo rumbo a algún proyecto. De hecho, es durante el descanso de verano cuando muchas personas se replantean un giro personal o profesional.
Bienestar y autorresponsabilidad
«Piensa en bienestar». Y de repente la mente se te va a la tumbona, el paseo en el mar o en la montaña, el cóctel… ¡Y es maravilloso! Por eso, las vacaciones tienen todo el sentido: para no hacer, soltar, recargarse, descansar, respirar hondo y decir «qué maravilla». Seguro que esa sensación de bienestar la has experimentado muchas veces. Ahora bien, si solo asociamos bienestar a esa sensación en vacaciones… ¿Qué harás cuando te toque volver? ¿Estrés postvacional? Conozco muchas personas que los días previos a volver a trabajar tras el verano experimentan un pico de estrés.
Si tienes la suerte de trabajar para una empresa que se toma en serio lo del Bienestar Organizacional estarás de suerte a la vuelta de septiembre. Quizás encuentres algunas actividades para facilitarte la vuelta. Pero, ¿y si no? Dejar tu bienestar en manos de tu empresa o de circunstancias externas (el clima, que encuentres un trabajo, que te suban el sueldo, que te cambien de jefe…) es como jugar a la lotería sin haber invertido demasiado en boletos. En realidad, tu bienestar depende de ti. Estar en equilibrio, sentirte bien, mirar a la vida con optimismo, cuidar de tu cuerpo, marcarte objetivos e ir a por ellos. Todo eso depende de ti. Y todo eso te aporta el bienestar que necesitas a la vuelta de las vacaciones, para afrontar el otoño y el invierno con armonía y plenitud.
Bienestar y felicidad
El bienestar es una de las antesalas de la felicidad. Si bien la felicidad es un estado mental más profundo y no podríamos identificar un único camino posible para llegar a ser plenamente felices, lo cierto es que cuando gozamos de bienestar emocional estamos más cerca de sentirnos más felices.
Martin Seligman es reconocido como uno de los fundadores de la Psicología Positiva. A lo largo de sus investigaciones de más de 20 años sobre bienestar y felicidad, concluye que existen cinco componentes que están presentes en las personas que afirman sentirse felices. Esta es su teoría del bienestar, resumida en su modelo PERMA.
Según Seligman, una persona que es capaz de fortalecer cada una de las dimensiones de su modelo, gozará de un mayor bienestar emocional. Las 5 dimensiones del modelo PERMA son:
- Positive emotions (Positividad o emociones positivas). Aumentar emociones positivas cada día, reconociendo el beneficio de estas para nuestra salud.
- Engagement (Compromiso). Supone compromiso con nosotros mismos y utilizar nuestras fortalezas para conseguir un estado de armonía.
- Relationships (Relaciones positivas). Como seres humanos, somos seres sociales, algo que nos ayuda a alcanzar nuestro bienestar. Compartir nuestro tiempo con otras personas en contextos agradables nos ayuda a aumentar nuestro bienestar.
- Meaning (Significado). «Vida significativa» como búsqueda de sentido, dando significado y propósito a nuestra vida.
- Acomplisment (Logro). Implica establecer metas que nos motiven conseguirlas. Permitiendo el crecimiento y desarrollo de las capacidades humanas.
El modelo PERMA en acción
Cualquier trabajo que lleves a cabo sobre el bienestar personal influye directamente sobre todas las dimensiones que forman tu ser: física, mental-emocional, relacional, espiritual. Porque todas están dimensiones se relacionan entre sí.
Una de las formas que tienes de trabajar sobre tu bienestar emocional y afrontar el último trimestre del año con energía y optimismo (como cuando estabas de vacaciones) es poniendo en práctica el modelo PERMA, ya sea que lo quieras aplicar a tu vida persona o a tu vida profesional. Por eso te propongo que lleves a cabo una reflexión sobre cada una de las dimensiones de este modelo en tu vida en este momento, y veas cómo potenciarlas.
Vamos con algún ejemplo:
POSITIVIDAD: Cultiva una mentalidad abierta y optimista, enfocándote en lo bueno en lugar de obsesionarte con lo negativo de tu vida.
Por ejemplo… mantén un diario de gratitud, anotando tres cosas positivas que ocurrieron en tu día. Desde ese delicioso café de la mañana hasta el sol de la tarde.
COMPROMISO: Encuentra tu pasión y vuélvete adicta a ella. Tómate cada día una dosis de tu pasión. Sumérgete en actividades que te hagan perder la noción del tiempo. ¿Recuerdas aquellas que hacías durante tus vacaciones?
Por ejemplo… si te gusta la jardinería, dedica unas horas al día a cuidar de tus plantas. Si te gusta hacer deporte, no lo dejes para el fin de semana y dedícale un tiempo diario.
RELACIONES POSITIVAS: Las conexiones humanas son alimento para tu espíritu. Nutre tus relaciones, ya sean amigos, familiares o tus mascotas.
Por ejemplo… dedica tiempo de calidad a estar con ellos, ya sea una cena compartida o simplemente un paseo en el parque. Las risas y el buen humor te aseguran el bienestar que buscas.
SIGNIFICADO: Encuentra el porqué detrás de lo que haces. Busca un propósito en tu vida y en tus acciones diarias. Profundiza en tus valores. Si trabajas en un proyecto, comprende cómo contribuye al bienestar de otros.
Por ejemplo… si te dedicas a educar, cada vez que ayudas a un estudiante a aprender algo nuevo, sé consciente de que estás aportando a un futuro más brillante. Si te dedicas a llevar viajeros, piensa que tu labor diaria les permite desarrollar sus propios propósitos, etc.
LOGRO: Ponte objetivos y celebra tus éxitos, ya sean grandes o pequeños. Alcanzar hitos te inyecta un sentimiento de logro y satisfacción. Divide tus objetivos en metas pequeñas, alcanzables y motivantes para ti.
Por ejemplo… si deseas aprender un nuevo idioma, celebra cada vez que puedas mantener una conversación más fluida. Si te propones mejorar tu dieta, celebra cada vez que logras una pequeña meta.
El modelo PERMA es solo un ejemplo de acción que puedes llevar a cabo para evaluar tu nivel de bienestar emocional y potenciarlo. Además, lo puedes unir a cualquier otra iniciativa que trabajes para la mejora de tu bienestar físico.
Recuerda que tu bienestar depende de ti.
CRISTINA JARDÓN es Pedagoga, Experta en Inteligencia Emocional, Mindfulness y Compasión. Autora de “Oh, Mindful Day!” y de “Me permito”, una guía práctica para mimarse. Acompaña a equipos y a personas en el entrenamiento de su inteligencia emocional y la mejora de su vida con mindfulness y compasión. Descubre cómo desarrollar tu Sabiduría Interior con Cristina en Instagram (@cristinajardon_).
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