Lucía Gómez es experta en nutrición natural y está formada en alergias alimentarias. Autora de Cocina tu cambio y Ama lo que comes, ha sido pionera del «método de los 4 fuegos» y lidera su propia escuela de comida sana que ya cuenta con más de 15.000 alumnos. Sigue a Lucía en @cocinandoelcambio o visita su web, para ver más recetas, conocer su método S.A.N.O o aprender a cuidarte a través de la alimentación y de comer bien. Hemos extraído de su libro tres de sus imprescindibles.
TRES IDEAS IMPRESCINDIBLES
Ensaladas de bote para llevar
Son el truco perfecto para llevar tus ensaladas, con el aliño incluido. Sí, tal como lo lees. Ya sé que lo normal cuando preparas una ensalada para llevar es poner el aliño en un frasco por separado para echarlo en el momento justo antes de comer, pues de lo contrario el resto de los ingredientes perderían su textura y se oxidarían.
Y la verdad es que esto complica las cosas, sobre todo, porque existe el riesgo de que se derrame el aliño durante el transporte. No es el caso de las ensaladas de bote, ya que puedes poner todo junto y aun así todos los ingredientes seguirán con una textura perfecta a la hora de comer. Gracias a este método disfrutarás de ensaladas frescas, deliciosas y supersaludables en cualquier lugar y de forma muy práctica, aunque también puedes comerlas en casa. Cuando llegue la hora de consumirla, lo único que tendrás que hacer es volcar todo el contenido del bote sobre un plato, de manera que el aliño se mezcle con el resto de los ingredientes al caer. Si no tienes un plato, puedes comerla directamente en el bote. Solo tendrás que agitarlo con energía y disfrutar.
Otra de sus ventajas es que puedes hacerlas de cualquier ingrediente que imagines y que más te guste. Eso sí, es fundamental que tengas en cuenta el orden en el que los pones en el bote para que los alimentos más sensibles no pierdan la textura al entrar en contacto con el aliño.
Gazpacho tradicional y de frutas
El gazpacho es una de las comidas más típicas del verano. En casa somos grandes admiradores porque no solo es estupendo por su sabor y su frescura, sino que sienta de maravilla cuando hace calor, además de ser muy saludable y nutritivo. A su vez, es muy fácil y rápido de hacer, lo cual está genial en verano porque te salva de no pasarte horas y horas en la cocina con tanto calor. Por no hablar de que te garantiza tu ración diaria de verduras. A continuación te voy a enseñar mi receta del gazpacho tradicional y cómo versionarla para que te atrevas a probarlo en diferentes sabores. Te va a encantar.
Trucos para que te quede espectacular
- Utiliza un buen aceite de oliva virgen extra que sea suave, y si puede ser de las variedades hojiblanca o manzanilla.
- Es fundamental que utilices tomates de buena calidad. Te recomiendo que estén bien maduros y que no los pongas en el frigorífico. Cómpralos ecológicos para así no tener que quitarles la piel. El tomate de pera es la mejor variedad para gazpacho y, aunque puedes usar el de rama, los primeros siempre funcionan de maravilla porque tienen mucha carne y la piel es muy fina. Si quieres aumentar la intensidad del sabor, ponle una ramita verde del propio tomate.
- No es necesario echar pan.
- Si te queda muy espeso, puedes añadir agua fría.
- Hay quien lo macera; yo lo hago al momento y siempre hago más y me tomo lo que sobra por la noche.
- Para triturar los ingredientes utiliza una batidora potente que te ayude a conseguir una textura perfecta.
- Si no tienes tiempo para refrigerarlo, tritura tres hielos junto con los ingredientes para que quede más fresquito.
Mil y un hummus
El hummus es fantástico para comer legumbres de una forma diferente; además, al estar trituradas, se digieren mejor. Se hace en un momento y está delicioso, por lo que me parece una opción perfecta para un picoteo. Puedes acompañarlo con crudités (palitos de zanahorias, apio, pimiento…) o con unas tostaditas de trigo sarraceno.
A continuación, voy a enseñarte la receta clásica del hummus de garbanzos y vas a comprobar que, aunque en muchas recetas lo especifican, en la original el aceite de oliva virgen extra se pone por encima, jamás en la mezcla. Y un trucazo: el tahini. Tiene que abundar, nada de poner solo una cucharadita, pues nos quedaría un puré de garbanzos. Para comer un buen hummus, necesita generosas cantidades de tahini.
Para darle un toque diferente y variarlo al máximo y tener recetas infinitas y no aburrirte nunca, Lucía nos deja un montón de trucos y diferentes ideas de toppings con los que acompañar tu hummus.
Variaciones de toppings
- Semillas tostadas.
- Garbanzos cocidos y tostaditos en el horno para decorar.
- Tomates secos hidratados y cortaditos en láminas muy finas
- y con un poquito de aceite de oliva virgen extra y sal.
- Carne picada (o proteína de girasol) salteada con especias.
- Piñones tostados u otro fruto seco, con un chorrito de aceite
- de oliva virgen extra y un poquito de sal.
- Hierbas aromáticas al gusto: albahaca, cilantro, cebollino,
- perejil…
- Coliflor asada al horno, con un chorrito de aceite de oliva y sal.
- Coles de Bruselas cortadas en cuartos y salteadas con un
- poquito de aceite de oliva virgen extra y limón.
- Granada para decorar.
